La importancia de hacer un balance general

Home/Contabilidad/La importancia de hacer un balance general
Comparte este artículo!

En México hay más de cuatro millones de micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) y de ellas, casi la mitad declaran tener el apoyo de un contador que lleva a cabo sus obligaciones fiscales; sin embargo, la realidad es que casi 900 mil empresas no llevan registros contables; esto, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y la Encuesta Nacional sobre Productividad de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (Enaproce).

A partir de esos datos, se prevé que existe una contraposición con lo que declaran dichos negocios, lo cual supone que hay una importante falta de profesionalización en el área fiscal y contable de dichos negocios.

De igual forma se presume que el balance general es una práctica que muy pocas Mipymes llevan a cabo, lo cual les quita la posibilidad de tomar las acciones necesarias para mejorar el negocio e, incluso, para calificar por un crédito o programa oficial.

Elaborar dicho balance ayuda a las empresas a conocer a detalle la situación financiera del negocio en un periodo determinado, así como para saber con toda claridad cuántos activos posee la empresa, los pasivos que ha adquirido y el capital con que cuenta el negocio.

Para elaborarlo es necesario contar con los siguientes elementos:

Activo corriente: Efectivo en caja o bancos; cuentas por cobrar; inventario de mercancías; pagos por adelantado.

Activo fijo: Vehículos, muebles, equipos, inmuebles, terrenos.

Pasivo corriente: cuentas por pagar; impuesto sobre ventas; impuestos sobre salarios; sueldos devengados; ingresos no percibidos; pagarés por pagar a corto plazo; préstamos bancarios por pagar a corto plazo.

Pasivo no corriente: pagarés por pagar a largo plazo; hipotecas por pagar.

Patrimonio: las aportaciones hechas por los socios o los accionistas; utilidades obtenidas.

Con toda la información recabada, viene la fase de interpretar los datos y si las cuentas “cuadran” es cuando el pasivo, sumado al capital, es igual al monto de los activos. En el caso de que no sea así, se podría hablar de pérdidas para el negocio y deberán revisarse los balances generales anteriores, para así identificar en qué momento y en qué aspectos comenzaron a surgir los desequilibrios.

Lo ideal es realizar dos veces al año el balance general: en junio para tener un corte preliminar del año y el segundo en diciembre para obtener un panorama al cierre del ejercicio fiscal y además aportará una perspectiva clara para tomar las estrategias necesarias para encarar con éxito el siguiente año.

Elaborar un balance general requiere de ciertos conocimientos y experiencia; en CICDE somos expertos en su realización. Ponte en contacto con nuestros contadores para que ayuden a hacerlo.

 

Fuente: www.entrepreneur.com/article/280469

Comparte este artículo!
2023-08-31T14:06:05+00:00 octubre 19, 2017|

About the Author:

Consúltanos