Las autoridades fiscalizadoras pueden realizar actos u omisiones que pueden causarte daño en tus derechos. Tú como contribuyente tienes la posibilidad de ofrecer defensa fiscal y en este artículo te mencionaremos algunos mecanismos para lograrlo.
Las principales formas de hacer frente a la autoridad y defenderse
Existen diversos medios para enfrentar los créditos fiscales y demás actos que lesionan nuestros derechos como contribuyentes. En esta ocasión citaremos los más comunes que podrás utilizar para defenderte.
Recurso de revocación
Aunque se trata de un mecanismo a nivel administrativo, puede ser efectivo para obtener la revocación del acto de molestia por parte de la autoridad que lo emitió.
El recurso de revocación permite que la autoridad pueda revisar sus actuaciones y proceder a la cancelación de la sanción si lo considera procedente. La ventaja de recurrir a este medio es que no necesitarás ofrecer garantía del crédito fiscal.
Tendrás un plazo de 30 días hábiles para presentar este recurso. Incluso puedes ofrecerlo sin agravios para detener el procedimiento administrativo de ejecución y complementarlo posteriormente.
Recurso de inconformidad
Es muy similar al recurso de revocación, pero este es aplicable contra actos del Instituto Mexicano del Seguro Social y del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores. Podrás presentarlo cuando te finquen un capital constitutivo, una rectificación de prima de riesgo más elevada a la que te corresponde o contra cualquier otro acto.
Juicio de nulidad
Hay que destacar que los recursos en sede administrativa son optativos. Pero si lo deseas, puedes iniciar tu defensa desde una instancia como lo es el juicio contencioso administrativo, el cual también podrás encontrarlo con la denominación juicio de nulidad.
Los montos del crédito a combatir determinarán si acudirás al juicio en su modalidad ordinaria o por la vía sumaria. La promoción de este juicio es ante el Tribunal de Justicia Administrativa, en sus salas regionales. El abogado fiscalista ofrecerá los conceptos de nulidad correspondientes para buscar que el acto de la autoridad quede sin efectos.
Amparo
En caso de que la sentencia del Tribunal de Justicia Administrativa no sea favorable para tus intereses, podrás solicitar el amparo y protección de la justicia federal. La Constitución contempla este mecanismo como un control para comprobar el respeto a los derechos humanos, también aplicables en materia fiscal.
A través del amparo directo podrás combatir las sentencias que están en tu contra y que fueron producto del juicio de nulidad antes realizado. El grado de especialización que requiere la presentación de esta demanda puede satisfacerla un abogado fiscalista experimentado.
También podrás impugnar las reformas tributarias que pueden socavar tus derechos como contribuyente. Por medio del amparo indirecto, puedes combatir leyes federales que te causen perjuicio, como pueden ser:
- Reducción total o parcial de deducciones.
- Tarifas desproporcionales.
- Gravámenes elevados.
- Responsabilidad solidaria que atente contra tus derechos.
Una recomendación adicional
Aunque los recursos administrativos pueden ser presentados por un contador, lo recomendable es que lo haga un abogado fiscalista con experiencia. De esta manera, podrá crearse una línea de defensa sólida desde el principio y que la teoría del caso no sea endeble.
Además, para los juicios de nulidad y el amparo, es requisito acreditar que se cuenta con la formación de licenciado en derecho. Por ello te recomendamos que acudas con especialistas en materia fiscal que puedan representarte en calidad de abogados.
El éxito en la defensa en materia fiscal sí es posible si atiendes a tiempo el problema. Puedes solicitar a un despacho de fiscalistas mayores informes para que puedas exponer tu caso y conocer las alternativas que existen para enfrentarte a la autoridad.
También te va a interesar: Conoce qué documentos debes presentar en una defensa fiscal
SÍGUENOS EN NUESTRAS REDES